31 enero, 2015

Un edificio horizontal en Chicago.


Robie House (la casa Robie) proyectada por el arquitecto Frank Lloyd Wrigth


Este edificio es la obra cumbre de Wrigth y uno de los más representativos de la arquitectura del siglo XX.


Teníamos que conocerla, no podíamos irnos de Chicago sin verla. Llegamos fácilmente en la línea roja del metro dirección Sur a la estación 55th. Tras cruzar la Universidad de Chicago en el barrio de Hyde Park, llegamos al 5727 Woodland Av. que es la dirección de la casa Robie.

Fachada lateral
La otra fachada lateral
Lo primero que me llamó la atención fueron las formas tan sencillas y limpias. Me pareció una casa muy bonita y me lo sigue pareciendo. Está rodeada de edificios de estilo victoriano o así, verticales y llenas de adornos; son casas que aunque son más modernas que ésta sin embargo parecen más antiguas. Es que esta casa se construyó entre 1908 y 1910.

El alero
La fundación Frank Lloyd Wright gestiona este edificio, eso quiere decir que se hace cargo de las visitas, el mantenimiento y la tienda de recuerdos.


Entramos por un lateral que antiguamente era la puerta del garaje y tras adquirir el tíquet en la tienda nos informaron que un voluntario nos guiaría en la visita. Resultó ser un señor mayor, probablemente jubilado, que durante una hora nos contó un montón de detalles de la casa. Se le notaba que le gustaba muchísimo y que además él dedicaba su tiempo a la fundación. 

Fue muy interesante ver como lo vivía y lo explicaba y por supuesto, lo que nos dijo.

Entramos a la casa por la planta baja, donde hay un salón que podía ser de juegos o una oficina con una bonita entrada para dejar los abrigos. Los muebles  y la decoración son de madera de un estilo sobrio y elegante con aires modernistas pero sin tanta floritura y adorno vegetal. También las lámparas y los pasamanos de las escaleras son del mismo estilo.

El guía nos contó que el cliente (Mr. Robie) que encargó la casa estaba muy interesado en las bicicletas, motocicletas y automóviles  y según estas ideas modernas y mecanicistas quería una vivienda innovadora y luminosa que transmitiera ligereza, sin excesos ornamentales, sin curvas y cuyas habitaciones no estuviesen interrumpidas. Este pensamiento estaba en línea con el planteamiento arquitectónico de Frank Lloyd Wright. 

Las ventanas del salón
Subiendo la escalera se llega a la planta principal. En el centro está el salón y en el centro del salón, la chimenea. Es muy amplio y agradable, se ve perfectamente la calle pero desde la calle no se ve el interior de la vivienda.Las ventanas que rodean toda la habitación están hechas con vidrieras con unos dibujos geométricos que son la marca de la casa.


El salón

En la primera década del siglo pasado Frank Lloyd Wright había desarrollado un estilo propio basado en líneas horizontales, aleros pronunciados y plantas centradas en el hogar, es decir en el corazón de la casa: la chimenea o el salón. A este modelo de arquitectura se le conoció como "casas de la pradera" porque según Wright la horizontalidad encarnaba los valores de Estados Unidos que estaban en las praderas del medio oeste.

En uno de los extremos de la planta principal, que es muy amplia y diáfana, hay un mirador que es la salita del desayuno. Está conectada con la cocina en la misma planta. Una cocina grande y luminosa con una gran mesa de madera en el centro y todas las modernidades de aquellos años: agua corriente fría y caliente, calefacción y un gran fregadero de cerámica precioso.


El desayunador
Sería interesante ver cómo sería esa cocina hoy en día, llena de electrodomésticos. Porque no hay ninguno, bueno si, un frigorífico un poco viejo que supongo que hizo su función en sus tiempos.


La cocina

La cocina

Es una casa cómoda por su distribución centrada. La escalera está en un extremo y por ella subimos a la planta superior donde se encuentran los dormitorios, el principal con baño a todo lujo incluido. Todas las habitaciones tienen calefacción central, ventanas a la calle con las vidrieras que comenté y los mismos detalles decorativos del salón. Los muebles, ventanas, lámparas, puertas de todas las habitaciones están todas diseñadas por Wright formando un conjunto homogéneo, que le dá mucha calidez.

Un dormitorio
El proyecto se desarrolló en 1908 y en 1910 ya estaba construida la casa. Sin embargo la familia Robie dejó la casa en diciembre de 1911 porque tuvieron dificultades económicas y matrimoniales y la vendieron. El siguiente propietario murió al año y se volvió a vender. La nueva familia la ocupó hasta 1926 momento en que la vendió al seminario teológico de Chicago que la usó como residencia y comedor para estudiantes casados.

Depués de esto la casa sufrió varias vicisitudes, como un intento de derruirla en 1941. Esto provocó la ira de Wright que con 90 años se personó en Chicago para defender el valor de su arquitectura y denunciar el plan de derribo. Afortunadamente un estudio de arquitectura la compró y se evitó. Durante las décadas siguientes el edificio fué designado hito histórico nacional y entró en el registro nacional de lugares históricos en 1966, reconocida como hito de Chicago en 1971 y pasada a la universidad. Pero esto no evitó que se usara como oficinas y que sufriera actos vandálicos y negligencias.

La universidad y la fundación acordaron un plan de restauración en 1997 y en 2002 comenzaron las obras. Había filtraciones de agua, daños en el enladrillado y desperfectos en los aleros. 
Ahora siguen los trabajos de restauración que van muy lentos y son muy costosos, por ejemplo: cada aplique cuesta 800 dólares y hay treinta y tantos.


Ventana
Escalera
Es una casa de lujo incluso hoy en día. Pero es una casa de museo, no es una casa para vivir como se planteó en su construcción porque no sé cómo en el siglo XX! se podría mantener una casa así conservando las piezas originales y el ambiente original, pero que al mismo tiempo se pudiese vivir con la comodidad con la que se diseño. Aunque con dinero...


Preciosa, me ha encantado. Una casa donde se debió de vivir bien, aunque fuese un hogar muy poco tiempo.




 

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