Tomamos un barco al pie de la Willis Tower y subiendo por el ramal norte del río llegamos al Navy Pier que es el parque de atracciones de Chicago, en el lago.
El paseo en barco fue un desfile de rascacielos. Atención al siguiente edificio:
Es el Merchandise Mart, un edificio comercial art decó que cuando se construyó en 1930 era el más grande del mundo. Tuvo su propio código postal hasta 2008 y está situado en la unión de las dos ramas del río Chicago.
Los puentes son levadizos y forman parte de las calles y avenidas. El río es una calle más ya que puedes moverte por él en water-taxi o en tu barco.
Hay una avenida, Wacker Drive, que discurre a lo largo del río. Tiene dos niveles en su mayor parte y se la cita como precursora de la moderna autopista.
Al bajar del barco nos encontramos en el Navy Pier. Además del parque de atracciones hay un invernadero, restaurantes, canchas deportivas y museos.
Este barco no es para turistas, pero en el Navy Pier hay otros que hacen cruceros por el lago para ver la ciudad desde el mismo o para cruzarlo.
Al salir de allí, enfrente del Children's Museum hay una fuente (Gateway Park Fountain) donde los niños se los estaban pasando pipa con el agua y el viento.
En plena Magnificent Mile (N. Michigan Av.) la calle con las tiendas más caras de Chicago, pregunté a una señora si conocía algún sitio para comer pronto, porque se estaba haciendo tarde, y me envió a la Water Tower a un restaurante llamado foodlife a comer rápido.
Foodlife es un local enorme que a su vez tiene minirestaurantes de comida rápida de todas las especialidades. Es todo un compendio de fast food: barbacoa, sushi, taquería, pizzería, wok, ensaladas, dulces, pollo frito, pasta...
Ya que estábamos allí nos tomamos un hotdog cada uno. Son enormes y les puedes echar de todo lo que se te ocurra. Estuvo rico, pero no para repetir. No volvimos a probar los perritos calientes en todo el viaje.
John Hancock Center está al lado. Subimos a su observatorio mirador a 94 pisos de altura para apreciar las playas y puertos deportivos. Como emoción añadida tiene el Tilt que es una especie de ventana alta que se inclina hacia el suelo con los turistas sujetos a ella para apreciar lo lejos que está el suelo.
También desde allí se ven los edificios de apartamentos de Mies van der Rohe, a los que no podíamos dejar de ir... Bajamos a verlos de cerca.
Estos bloques de apartamentos son de color oscuro, rectos rectísimos. No hay ni un solo detalle que rompa la verticalidad ni el orden. Las calles en las que se encuentran son muy agradables, arboladas. El conjunto es muy lujoso, hay una piscina común con vistas a la playa y los pisos deben ser amplios y luminosos.
Este barrio es muy agradable para pasear y paseando vimos arte en la calle: un pie, una familia...
El ocio nocturno está en la N. State St. Una calle llena de bares muy animados. House of Blues un local de música en vivo al lado mismo de las Marina Towers y el río. Se puede cenar o tomar una copa mientras se escucha música en vivo.
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| Rascacielos de Chicago |
El paseo en barco fue un desfile de rascacielos. Atención al siguiente edificio:
Es el Merchandise Mart, un edificio comercial art decó que cuando se construyó en 1930 era el más grande del mundo. Tuvo su propio código postal hasta 2008 y está situado en la unión de las dos ramas del río Chicago.
Los puentes son levadizos y forman parte de las calles y avenidas. El río es una calle más ya que puedes moverte por él en water-taxi o en tu barco.
Hay una avenida, Wacker Drive, que discurre a lo largo del río. Tiene dos niveles en su mayor parte y se la cita como precursora de la moderna autopista.
Al bajar del barco nos encontramos en el Navy Pier. Además del parque de atracciones hay un invernadero, restaurantes, canchas deportivas y museos.
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| Navy Pier |
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| Yate con helicóptero |
Al salir de allí, enfrente del Children's Museum hay una fuente (Gateway Park Fountain) donde los niños se los estaban pasando pipa con el agua y el viento.
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| Gateway Park Fountain |
En plena Magnificent Mile (N. Michigan Av.) la calle con las tiendas más caras de Chicago, pregunté a una señora si conocía algún sitio para comer pronto, porque se estaba haciendo tarde, y me envió a la Water Tower a un restaurante llamado foodlife a comer rápido.
Foodlife es un local enorme que a su vez tiene minirestaurantes de comida rápida de todas las especialidades. Es todo un compendio de fast food: barbacoa, sushi, taquería, pizzería, wok, ensaladas, dulces, pollo frito, pasta...
Ya que estábamos allí nos tomamos un hotdog cada uno. Son enormes y les puedes echar de todo lo que se te ocurra. Estuvo rico, pero no para repetir. No volvimos a probar los perritos calientes en todo el viaje.
John Hancock Center está al lado. Subimos a su observatorio mirador a 94 pisos de altura para apreciar las playas y puertos deportivos. Como emoción añadida tiene el Tilt que es una especie de ventana alta que se inclina hacia el suelo con los turistas sujetos a ella para apreciar lo lejos que está el suelo.
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| Tilt, atracción de infarto a 94 pisos de altura |
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| John Hancock Center |
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| Gold Coast a orillas del lago Michigan |
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| Puerto deportivo |
También desde allí se ven los edificios de apartamentos de Mies van der Rohe, a los que no podíamos dejar de ir... Bajamos a verlos de cerca.
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| La calle donde están los apartamentos lleva su nombre |
Estos bloques de apartamentos son de color oscuro, rectos rectísimos. No hay ni un solo detalle que rompa la verticalidad ni el orden. Las calles en las que se encuentran son muy agradables, arboladas. El conjunto es muy lujoso, hay una piscina común con vistas a la playa y los pisos deben ser amplios y luminosos.
Este barrio es muy agradable para pasear y paseando vimos arte en la calle: un pie, una familia...
El ocio nocturno está en la N. State St. Una calle llena de bares muy animados. House of Blues un local de música en vivo al lado mismo de las Marina Towers y el río. Se puede cenar o tomar una copa mientras se escucha música en vivo.
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| "Los presidentes americanos" |
Las noches de verano y con buen tiempo son muy agradables en Chicago. Hay gente por la calle, se puede pasear y los bares están animados. Una cerveza en cualquiera de ellos como Public House (400 N. State St.) o en Rosie's un bar irlandés pequeñito y muy animado es un buen fin de día.
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