Los americanos adoran la barbacoa. Todo el mundo tiene una. Si no tienen jardín, no importa, también se puede hacer en el balcón.
Fuimos a un partido de béisbol en el Cellular Field, el campo de los White Sox.
Llegamos en el metro sobre las 7 y mucha gente llegó cuando nosotros y no hubo ni apretones ni prisas ni nada. Entramos tranquilamente. Encima tuvimos la buenísima suerte de que una pareja nos diera un par de entradas gratis. Fueron muy amables; esta es otra cosa que no esperaba: la amabilidad con que nos trató todo el mundo.
Hubo quien llegó antes y preparó barbacoas en el aparcamiento, para ir ambientándose. Al parecer es de lo más normal.
Hay muchísimos puestos de comida: perritos, hamburguesas, pizzas, y hasta churros en el corredor detrás de las gradas. Están abiertos todo el tiempo que dura el partido. Y si alguien tiene calor también puede darse una ducha.
Ganaron los locales y lanzaron fuegos artificiales para celebrarlo.
Tampoco me esperaba unos estudios de televisión en la calle.
Dos cadenas la CBS y ABC hacen sus informativos locales en estudios a pie de calle, de modo que los transeúntes ven cómo se hace y saludan a los presentadores (que devuelven el saludo). Un cristal sustituye a la pared tras las cámaras y al final del informativo una de ellas enfoca a los mirones que saludan. Por supuesto nosotros también salimos en la tele americana.
Dos cadenas la CBS y ABC hacen sus informativos locales en estudios a pie de calle, de modo que los transeúntes ven cómo se hace y saludan a los presentadores (que devuelven el saludo). Un cristal sustituye a la pared tras las cámaras y al final del informativo una de ellas enfoca a los mirones que saludan. Por supuesto nosotros también salimos en la tele americana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario